El pasado lunes 5 de junio, una beligerante Margarita Zavala “sin ocultar su molestia por los resultados electorales en este proceso electoral en cuatro estados” obtenidos por su aún partido, apuntan las crónicas; reclamaba al “niño Fidencio” de la Mafia Azul, Ricardito Anaya “comportarse como jefe” y definir “de una vez por todas” la candidatura presidencial del PAN para 2018. Con voz de primera dama le dijo a Ciro Gómez Leyva “es la apuesta al futuro o el regreso al pasado lo que se está peleando”; asumiendo que ella representa ambas cosas, el regreso del pasado en un futuro, le concedo razón, en su partido no pueden estar peor; o tal vez sí, si no le cumplen su exigencia de en un mes discutir ya, lo que –asegura- debieron en algún momento haber discutido, su candidatura a la presidencia.
Ese mismo día, el pasado lunes 5 de junio; otras crónicas daban cuenta “madres y padres de los 49 niños y niñas que perdieron la vida en el incendio ocurrido en la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora, instalaron un monumento frente a las instalaciones de las oficinas centrales del IMSS en la Ciudad de México, a ocho años de lo ocurrido y ante la impunidad que prevalece en este caso. Un monumento con un número 49 y las letras ABC fueron clavadas en la acera lateral de Paseo de la Reforma, en una emotiva ceremonia en la que madres y padres aplaudieron por este logro que alcanzaron para mantener la memoria y que las autoridades no olviden que no ha habido justicia”.
Y en efecto, se cumplieron 8 años de una tragedia que no debió suceder nunca; un día en que las complicidades, la negligencia, la corrupción, los interese de la familia presidencial de la época, el tráfico de influencias, concurrieron en un mismo momento, a la misma hora, en el mismo lugar, causando la muerte de 49 inocentes y lesiones en diferentes grados a 80 más; cuyos padres enfrentaron a partir de ese día, además del dolor eterno de la pérdida de sus hijos, la insultante prepotencia y protección de los verdaderos responsables por parte del Gobierno de Felipe Calderón, de su esposa, la Primera Dama Margarita Zavala, de Juan Molinar Horcasitas, del entonces gobernador Eduardo Bours y de la Procuradora Marisela Morales, que además de burlarse en presencia de los padres de la tragedia, sesgó y congeló las investigaciones.
De lo ocurrido se han documentado múltiples testimonios; Diego Enrique Osorno en su libro “Nosotros somos los culpables” –La Tragedia de la Guardería ABC- en su prefacio apunta “El propósito de este libro es preservar la memoria colectiva del 5 de junio de 2009, para que nunca más ocurra de nuevo. También ha sido escrito como una protesta. México no va a tener democracia ni justicia verdadera si olvida a los niños y niñas de la Guardería ABC”.
Aquí algunos de las versiones reales que describe el libro de Osorno “antes el almacén y la guardería eran una misma bodega donde había una maquiladora” –Ignacio Alduende empleado de la agencia fiscal del estado-; “a las dos de la tarde comenzamos a acostar a los niños en las colchonetas de la sala, ya que es la hora de la siesta, comencé a acomodarlos cabeza con cabeza, piecito con piecito para que no se golpearan” –Ana Sughey asistente educativa de la guardería ABC-; “Escuché un sonido raro, algo extraño, arriba del techo, es decir del cielo y me quedé estática, buscando encontrar de dónde provenía. Cuando bajé la vista comenzó a entrar humo de la esquina de la sala de descanso de los maestros” –Araceli Valencia auxiliar de salud de la guardería ABC-; “sacamos como 30 niños, pero no vi uno vivo, todos iban negritos, sus brazos sin fuerza” –vecino anónimo que participó en el rescate-; “el cuarto niño que saqué me partió el alma, iba todo descarapelado, como cuando a un tomate le quitas el cuerito” –despachador de gasolina-; “cuando la encontré le di gracias a Dios de que no hubiera muerto, lo hice de nuevo, cuando supe la magnitud de las muertes de niños que hubo” –Fabiola Domínguez madre de la niña sobreviviente Laura Bustamante-; “viendo fotografías descubrimos el rostro de nuestro hijo y pues pasamos a reconocerlo…entramos en un estado de shock…el Arzobispo estaba ahí, pero te quiero decir algo, yo al Arzobispo lo veía tan distante, tan fuera de lugar, tan impersonal, no transmitía nada absolutamente” Julio Cesar Márquez padre de Yeye-“.
Al siguiente sábado el presidente Calderón se apersono, recorrió con el gobernador –el mismo estólido que al ser cuestionado sobre su estado de ánimo después de la tragedia respondió “duermo como bebito, como niño”- y una buena comitiva, dos hospitales, el Infantil y el Chávez; se tomó la foto con cara de preocupado y prometió llevar a fondo las investigaciones para castigar a los culpables; no lo hizo, por el contrario los encubrió, en especial a Marcia Matilde Altagracia Gómez del Campo Tonella, principal accionista de la guardería y beneficiaria de la “concesión” del IMSS, prima y cercana a la Primera Dama Margarita Zavala; quien al ser cuestionada sobre su relación mintió en despoblado y con cinismo “efectivamente hay un parentesco con ella -Marcia Matilde- aunque yo no la conozco personalmente. Tengo entendido que tenemos un bisabuelo en común” aseguró; sin embargo el 31 de mayo de 2009, cinco días antes de la tragedia de la Guardería ABC, las notas sociales de la prensa de Hermosillo daban cuenta “rodeada de cariño, celebró 80 años de edad, doña Mercedes Gómez del Campo Zavala, madre de Margarita Zavala de Calderón, quien acompañada de su esposo, el presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa y de sus hijos, arribó al festejo, durante el cual se hicieron acompañar de familiares y amigos, entre los cuales estuvieron, Jorge, Soledad, Marcia -la 5 días después negada por Margarita- y Roberto Gómez del Campo, así como Carlos Gómez del Campo, Florencia Laborin y Marina Leyva Gómez del Campo, compartiendo este bonito evento familiar”.
La tragedia de la Guardería ABC es algo que nunca debió ocurrir jamás; dibuja el México real del gobierno de Felipe Calderón -además de su guerra-; si Margarita Zavala tiene un mínimo de congruencia y decoro, podría empezar por exigir con la misma fuerza que reclama definir la candidatura presidencial de su partido en no más de un mes; en el mismo tiempo concluir las investigaciones y castigar a los responsables reales del incendio de la Guardería ABC; aunque se trate de sus parientes.
¿Alguien puede asegurar que esto ya está decidido?