Esta mañana, la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), envió al menos unas ocho toneladas de víveres a la región del Istmo de Tehuantepec para distribuirlos entre las familias afectadas por el terremoto.
Los mentores agradecieron a los ciudadanos quienes respondieron al llamado para aportar alimentos, medicamentos y otros productos.
"Queremos decirles a nuestros hermanos que no están solos", señalaron los profesores quienes adelantaron que podrían apoyar económicamente para la construcción de miles de viviendas.
Entre consignas, los mentores se mostraron solidarios al dar el banderazo de salida de los víveres que serán distribuidos en la región, pero sobre todo a los más necesitados.
Se estima que la caravana arribe esta misma tarde al Istmo para después armar despensas y posteriormente distribuirlas.
Carina García
