El presidente electo y la lideresa de la institución bancaria se encontraron para comer, pero esto va más allá de tener una relación cordial con miembros de compañías de este rubro.
La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, continuó el lunes con una tradición familiar al comer en casa del presidente electo de México: 'cortejar' a los líderes de América Latina.
Andrés Manuel López Obrador dijo a través de Twitter que había invitado a Botín a comer en su casa. En un video que muestra a Botín y a López Obrador ante una estantería llena libros, el futuro mandatario comentó que los dos habían estado hablando "de manera amistosa" sobre la promesa de ofrecer seguridad a los bancos durante su Gobierno.
"Cuando fuimos a Cantabria, en 2017, cenamos con Miguel Ángel Revilla, presidente de ese país autonómico. También nos acompañó Ana Botín, presidente del Banco Santander. Hoy nos volvimos a encontrar; la invité a comer a la casa", detalló en la red social.
"Crecimiento es empleo, es bienestar, es paz y tranquilidad, por eso nos da mucho gusto estar aquí platicando, conversando con Ana", explicó AMLO en un video.
"Muchas gracias, presidente electo", respondió Botín. "Confiamos plenamente en que el Gobierno que entra va a seguir apoyando el desarrollo de México y pueden contar con el Santander".
Las buenas relaciones con los líderes latinoamericanos son clave para la fortuna de un banco que genera más del 40 por ciento de sus ganancias en la región.
Si bien López Obrador ha prometido gobernar con pragmatismo y dice que los negocios no tienen nada que temer con él, su carrera hacia la victoria en las elecciones de julio alarmó a algunos inversores y líderes empresariales.
La familia Botín, que lleva en la dirección del Santander desde al menos 1895, tiene mucha práctica en forjar lazos con políticos latinoamericanos potencialmente hostiles.
Su padre, el difunto Emilio Botín, respaldó la candidatura presidencial del socialista brasileño Luiz Inácio da Silva en 2002, financió su campaña y lo apoyó públicamente cuando otros inversores se retiraban del país.
Fuente: elfinanciero.com