Los fiscales federales implican directamente al presidente Donald Trump en los pagos ilegales a dos mujeres paras silenciar potenciales escándalos sexuales que amenazaban con perjudicar su campaña presidencial. Michael Cohen, exabogado del presidente que fue alguien de su máxima confianza, ya había reconocido que pagó a dos mujeres que amenazaban con salir a la luz pública aireando supuestas relaciones extramatrimoniales con el entonces candidato, y aseguró que lo hizo por lealtad a su jefe. Pero, al dar por buena su versión en un escrito presentado hoy en los juzgados, el Departamento de Justicia hace suya la acusación.
En otro escrito separado, presentado también este viernes, la fiscalía especial de Robert Mueller, encargada de la investigación de la trama rusa, menciona un contacto previamente desconocido de Michael Cohen con un ciudadano ruso en noviembre de 2015, cinco meses después de que arrancara oficialmente la campaña presidencial de Trump. Dicha persona dijo ser alguien "de confianza" en Moscú y ofreció a la campaña del magnate inmobiliario una “sinergia política”.
Propuso reiteradamente un encuentro entre Trump y el presidente Putin, alegando que esa reunión podría tener un impacto “fenomenal” tanto “político” como “empresarial”. Cohen explica que no aceptó la invitación, ya que contaba con otro interlocutor ruso para el proyecto de Trump, finalmente frustrado, de construir un rascacielos en Moscú, operación en la que Cohen actuó en representación del magnate. Pero aseguran los fiscales que Cohen habló con Trump sobre una posible reunión con Putin durante la Asamblea General de la ONU de 2015, poco después de que el magnate anunciara su candidatura presidencial.
Los dos escritos constituyen lo más parecido hasta la fecha a una acusación al presidente de Estados Unidos de conductas potencialmente delictivas.
En el escrito de la fiscalía del distrito sur de Nueva York, de 38 páginas, referente a un delito de financiación ilegal de campaña electoral del que Cohen se declaró culpable en agosto, se describe cómo el abogado "coordinó sus acciones con uno o más miembros de la campaña, incluyendo reuniones, llamadas telefónicas, sobre el hecho, la naturaleza y el tiempo de los pagos", para "suprimir las historias" de las dos mujeres y "evitar que influenciaran en las elecciones". "En particular, y como el propio Cohen ha admitido ahora, con respecto a los dos pagos, actuó en coordinación y bajo la dirección del individuo 1", prosigue el texto. En otros lugares del documento, se identifica a dicho "individuo 1" como Donald Trump.
Cohen, que un día dijo que estaría dispuesto a recibir una bala por Trump, pero que desde que decidió colaborar con la investigación se ha convertido en blanco predilecto de su ira, había pedido no pagar con la cárcel por los dos casos separados, sobre los que se espera se dicte sentencia la semana que viene: uno por violaciones de las normas de financiación de campañas electorales, y otro por mentir al Congreso acerca de sus maniobras, durante la campaña de las pasadas presidenciales, para lograr levantar un rascacielos de Trump en Moscú que no se llegó a construir.
Pero los fiscales del distrito sur de Nueva York recomiendan en su escrito que Cohen debe cumplir una pena de cárcel "sustancial". La ley federal contempla para sus delitos una pena de hasta cinco años en prisión, y los fiscales recomiendan una reducción modesta.
Cohen, aseguran los fiscales, "buscó influenciar las elecciones desde la sombra". "Lo hizo orquestando pagos ilegales y secretos para silenciar a dos mujeres que de otra manera habrían hecho públicas sus relaciones extramatrimoniales con el individuo 1", dice el escrito.
En el otro escrito, el del fiscal especial Robert Mueller, se califica de "grave" el delito de Cohen, pero se añade que “ha dado pasos significativos para mitigar su conducta criminal”. “Ha llegado lejos para ayudar a la investigación del fiscal especial”, escribe Mueller.
El fiscal especial asegura que Cohen proporcionó “información útil sobre ciertos asuntos relacionados con Rusia, centrales para la investigación”. Se refiere a “información sobre sus propios contactos con intereses rusos durante la campaña” y a un “relato detallado” de sus esfuerzos durante su carrera presidencial para construir una torre de Trump en Moscú.
Trump no tardó en reaccionar a la publicación de los escritos, a través de su cuenta de Twitter. "Absuelve totalmente al presidente, ¡Gracias!", tuiteó, erróneamente. La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, a través un comunicado, defendió que los documentos "no dicen nada de valor que no se supiera". "Cohen has mentido repetidamente, como ha apuntado la fiscalía", añade.
Cohen, de 52 años, se declaró culpable el pasado mes de agosto de violar las leyes de financiación de campaña, al organizar pagos para silenciar a mujeres que aseguraban haber mantenido relaciones sexuales con Trump, así como de otros delitos federales relacionados con sus negocios y actividad fiscal. El pasado 30 de noviembre se declaró culpable, también, de haber proporcionado información falsa al Congreso para rebajar la extensión de sus contactos con oficiales rusos para sacar adelante el frustrado proyecto inmobiliario del hoy presidente en Moscú. Los delitos de Cohen, aseguran los fiscales, marcan “un patrón de engaño que ha permeado su vida profesional”.
El País