La votación de la bancada de Morena en el Senado para decidir si continuaba Martí Batres como presidente de la Mesa Directiva de la cámara o si elegían a alguien más terminó en la exhibición del pleito entre el legislador y Ricardo Monreal.
Como coordinador del grupo parlamentario, Monreal convocó a una votación para este lunes, la cual terminó en la decisión de impulsar a la senadora Mónica Fernández a la presidencia del Senado, luego de que otras legisladores se retiraron de la contienda.
Tras perder la votación con 33 votos a favor del cambio y 29 por la continuación, Batres rechazó el resultado y acusó al líder de la bancada de haber ensuciado el proceso interno durante varias semanas y de haber incluido de último momento a los legisladores del Partido Encuentro Social (PES), aliados de Morena.
Además, el senador denunció la persecución de parte de Monreal, a quien acusó de ser un político faccioso y un factor de división en Morena.
Durante meses el senador @RicardoMonrealAme persiguió y me combatió para sacarme de la Mesa Directiva.¿Qué logró? Exhibirse como un político faccioso incapaz de encabezar un amplio movimiento. El riesgo es que regresemos a las épocas del cacicazgo y el poder de un sólo individuo
Lo han dicho otros y se corroboró hoy: @RicardoMonrealAes un factor de división en #Morena. Le hace mucho daño a nuestro movimiento.
En respuesta, Monreal defendió la votación y, sin nombrar a Batres, aseguró que las descalificaciones son injustas.
En política, las decisiones que se toman suscitan controversia y hasta polarización. El Grupo Parlamentario de @MorenaSenadoresvotó en libertad. Comprendo las reacciones y las descalificaciones: son injustas, pero actuaremos con tolerancia y altura de miras. #UnidadEnMorena
En tanto, la senadora Fernández, originaria de Tabasco y quien es vicepresidenta del Senado, aseguró en entrevistas con medios que la votación no tuvo irregularidades y agradeció el apoyo que recibió de su bancada.
Forbes