Pelearán “puros”, duros y rudos de PRI y Morena, a Gobernador: Alfredo Martínez de Aguilar

no me veras

* A la luz del “destape” de Alejandro Avilés es entendible la decisión de enviar a contender a cuatro muratistas. Solo priistas comprometidos con el proyecto nacional del Gobernador Alejandro Murat estarían dispuestos al sacrificio por lealtad.
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La evidente, pública y notoria ruptura entre Susana Harp y Salomón Jara en Morena, convertida en escándalo a nivel nacional por la ingenua rebeldía de esta, divide y enfrenta a las diversas tribus en Oaxaca, lo que fortalece y hace competitivo al PRI.

El lenguaje, signos y señales, tiempos y ritmos de la política, siguen siendo misteriosos para las mayorías profanas. No lo son tanto, sin embargo, para los iniciados y menos, sobre todo, para la vieja clase política.

Son las reglas del juego del viejo sistema político mexicano, sintetizadas en una serie de frases que encierran gran sabiduría intemporal. “En política no hay nada escrito”, “Ni los triunfos ni las derrotas son para siempre”.

A estas premisas básicas, plenamente vigentes, se suman otras: “En política no hay sorpresas, sino sorprendidos”; sentencias que ilustran a cabalidad el desenlace en el actual destape de candidatos a Gobernador de Oaxaca.

Es el caso de Salomón Jara Cruz y más de Alejandro Avilés Álvarez, quien de manera más que sorpresiva fue “destapado” como candidato de unidad  por el líder nacional del PRI, cuya campaña coordinará Javier Villacaña, quien tomó posesión como Secretario de Organización.

Como claro mensaje de unidad, Amlito Moreno Cárdenas estuvo acompañado por el Gobernador Alejandro Murat Hinojosa y los cinco aspirantes, Mariana Nassar, Eufrosina Cruz, Germán Espinosa, Paco Villarreal y Heliodoro Díaz.

Como es lógico y natural, la sorpresiva decisión nacional hizo aflorar en las redes sociales, una vez más, la eterna división de los oaxaqueños en general y de los priistas en particular, con opiniones a favor y en contra.

Por sus negativos, Jara y Avilés, virtuales candidatos de Morena y del PRI a Gobernador, respectivamente, comparten acres críticas en las redes sociales, pero también son operadores políticos “puros”, duros y rudos, con estructura y suficientes recursos para la campaña.  

No obstante, en realidad, nadie debe llamarse sorprendido, menos los cinco aspirantes a la candidatura del PRI, porque finalmente la sorpresa no es tan inesperada, a partir del hecho que en política no hay nada escrito.

A varios observadores y analistas llamó poderosamente la atención que el PRI-gobierno enviara a buscar la candidatura a cuatro muratistas químicamente puros, Mariana Nassar, Germán Espinosa, Paco Villarreal y Heliodoro Díaz.

A la luz del “destape” del PRI, se hace entendible la decisión anterior. Solo priistas comprometidos con el proyecto nacional del Gobernador Alejandro Murat estarían dispuestos, en un momento dado, al sacrificio por lealtad.

Estas características comunes a cuatro aspirantes priistas evitan o bien, minimizan el riesgo de fracturas o rupturas y anteponen la unidad, como lo han expresado Paco Villarreal y Eviel Perez Magaña, dirigente saliente del PRI.

Ello, independientemente, por supuesto,  del obligado inicio cuanto antes de la “Operación Cicatriz” por parte del propio Alejandro Murat y del virtual candidato de unidad del PRI a Gobernador, Alejandro Avilés.

Asimismo, era un hecho consumado con mucha antelación que la última palabra la tomaría el dirigente nacional del PRI de común acuerdo con el Gobernador, en función de las circunstancias y de su proyecto político.

Desde estudiantes de Maestría en la Universidad de Columbia junto con el Jaguar, Armando Ríos Piter, Amlito y Alejandro Murat, quienes incluso se tratan y respetan como hermanos, comparten un proyecto político común.

A lo largo de los años, ambos han ido haciendo realidad de manera paralela sus sueños y ambiciones políticas a grado tal que, los dos no solo han sido gobernadores de sus estados, sino que hoy son interlocutores con el presidente.

Es más, guste o no a muchos, Alejandro Murat Hinojosa es el Gobernador favorito, consentido y con sentido del Presidente Andrés Manuel López Obrador, como lo prueba el hecho que Oaxaca es el único estado que ha visitado 27 veces.

En esta estrecha relación e interlocución con el Primer Mandatario radica la fortaleza real, aunque frecuentemente regateada por mezquindad y mal entendidas fobias para con el Gobernador  Alejandro Murat.

Y la coyuntura de las circunstancias cambió radicalmente para el candidato de Morena. A querer o no, se acepte o no, la confrontación entre Susana Harp y Salomón Jara cada día, se agrava más al pasar de la fisura a la fractura.

La evidente, pública y notoria ruptura, convertida en escándalo a nivel nacional por la ingenua rebeldía de Susana Harp, necesaria y obligadamente, trae consigo la división y enfrentamiento entre las diversas tribus de Morena.

Además, la división y enfrentamiento entre los senadores Susana Harp y Salomón Jara, virtual candidato de Morena a Gobernador de Oaxaca irá escalando con el paso de los días, alimentada por Flavio Sosa, entre otros.

De hacerse realidad y tener éxito el llamado del incendiario dirigente de Comuna a realizar una movilización estatal a favor de Susana Harp, la actual correlación de fuerzas que impulsan a Salomón Jara cambiará, a pesar de la marca Morena.

 

@efektoaguila

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