* En el Hospital General de Zona del IMSS, funcionarios y médicos roban medicamentos psicotrópicos de uso controlado como Fentanilo, Propofol, Midazolam, Sevoflurano y Efedrina.
* La anarquía en el IMSS provoca falta de vigilancia en el ingreso de pacientes armados y con cocaína, como ocurrió con un elemento de la Marina que labora en el Gobierno del Estado.
El colapso del Sistema Nacional de Salud se agrava en el Instituto Mexicano del Seguro Social por el caos y saqueo de equipo como un tomógrafo, medicamentos e insumos, sobre todo, en Oaxaca.
En el Hospital General de Zona del IMSS, funcionarios y médicos roban medicamentos psicotrópicos de uso controlado como Fentanilo, Propofol, Midazolam, Sevoflurano y Efedrina.
Los anestesiólogos solicitan cinco ampolletas de psicotrópicos al día, pero solo utilizan dos, además que algunos presuntamente son adictos a éstos, lo que probaría un examen antidoping.
Para consumar el robo de narcóticos se utilizan firmas falsificadas en la Farmacia. De ello tiene conocimiento el director de Regulación y Fomento Sanitario de la Cofepris, Mario Martínez Rojas.
El 28 de febrero se recibió en la Delegación un oficio de la Cofepris, por mala administración de los estupefacientes al no existir registros en los libros de control y falsificación de firmas en recetarios.
El problema de ninguna manera es menor, por el contrario, es un asunto de seguridad nacional, ya que el Fentanilo es uno de los narcóticos más importantes en el tráfico de drogas en el mundo.
La anarquía en el IMSS provoca falta de vigilancia en el ingreso de pacientes armados y con cocaína, como ocurrió con un elemento de la Marina que labora en el Gobierno del Estado.
A semejanza de las cabezas de la mítica Hidra de Lerna las diversas modalidades de corrupción devoran al Instituto Mexicano del Seguro Social en general y en particular al IMSS-Oaxaca.
Las variantes de la corrupción en la Delegación Estatal del IMSS van desde el tráfico de influencia y de plazas hasta el presunto tráfico de medicamentos psicotrópicos, hostigamiento y acoso laboral.
Hasta ahora el saqueo se ha realizado con total impunidad como resultado de una mafia que opera como delincuencia organizada en la que participan funcionarios administrativos y médicos.
Resultan involucrados el líder de la Sección XXVIII del Sindicato de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), Carlos Mario Aragón Ziga, y la Subdirectora Administrativa, Janelly Zamora Sosa.
El probable tráfico de medicamentos psicotrópicos involucra al Jefe del Departamento de Suministro y Control del Abasto, Roberto Ruiz Flores, y a la Coordinadora de Farmacia, Leticia Real.
Asimismo, a la Jefa de Servicios de Desarrollo al Personal, Juana Hortencia Morales Sánchez, al Jefe de Servicios Jurídicos, Carlos Vasconcelos Beltrán, y a la Delegada Concepción Rueda Gómez.
Por instrucciones de esta última, el Jefe de Servicios Jurídicos dio carpetazo al no dar seguimiento a la denuncia en la FGR y utilizó ésta, para despedir a la licenciada Aída Delgado Ramírez.
Destacó que la misma denuncia la interpuso ante la Procuraduría General de la República pero al no comparecer el jurídico de la institución a respaldar lo dicho, la denuncia no procedió
Las represalias de las autoridades y funcionarios no se hacen esperar, desde luego, contra aquellos médicos, enfermeras y administrativos que se atrevan a denunciar la corrupción y los abusos.
Es el caso de la médica cirujana Donají Columba Martínez, matricula 99271534, con 16 años de antigüedad, rescindida de la Jefatura de Prestaciones Médicas por denunciar la corrupción.
La especialista en cirugía de tórax en México, acompañada de su madre Josefina, reiteró sus denuncias de corrupción en Detrás de la Noticia por Regeneración TV www.regeneracion.com.mx
Las denuncias, ampliamente documentadas, han sido dirigidas al Director General del IMSS, Zoé Robledo Aburto, y a la Secretaría de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval Ballesteros.
Las denuncias también han sido enviadas a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), a la Fiscalía General de la República (FGR) y al propio presidente Andrés Manuel López Obrador.
El Órgano Interno de Control, Comité de Ética y la División de Investigaciones Laborales del IMSS, no han dado respuesta de las dos denuncias, a pesar que han transcurrido 7 y 3 meses y medio.
Al no tener ninguna respuesta de las diferentes instancias en el tiempo reglamentario se infiere que todas las dependencias cuentan con un retraso significativo en los procesos a investigar.
No cumplir con los tiempos permite que los directivos del IMSS sigan inmersos en el desvío de recursos, tráfico de influencia, acoso laboral, carpetazo a los procesos legales e impunidad total.
Al tratarse de fármacos psicotrópicos, la cirujana urgió intervenir al Director General del IMSS, Zoé Robledo Aburto, a la Fiscalía General de la República, Secretaría de la Función Pública y CNDH.
La cirujana, quien ayer se entrevistó con el titular del IMSS, Zoé Robledo, confía que enterado de la corrupción intervenga el presidente López Obrador para que ésta no quede en la impunidad.
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