Con una histórica participación de potenciales compradores, gran afluencia de curiosos y una recaudación preliminar de al menos 28 millones 500 mil pesos, el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) realizó en el Complejo Cultural Los Pinos la subasta presencial a martillo de 82 vehículos, muchos de ellos de lujo o provenientes de actividades ilícitas.
Durante casi ocho horas de pujas, con los participantes que adquirieron una cifra histórica de más de 800 bases de compra, el organismo logró obtener un monto preliminar muy cercano a los casi 30 millones que calculaba como precio inicial, recursos que se destinarán a dos de los municipios más pobres del estado de Oaxaca.
El auto de lujo que más dinero logró levantar en este evento comercial fue una camioneta Ford Shelby F 150, roja, modelo 2016, incautado por la Fiscalía General de la República por un total de un millón 900 mil pesos, casi 700 mil pesos más respecto a su precio base de un millón 216 mil 800 pesos.
Le siguieron el deportivo marca Lamborghini Murciélago modelo 2007, por el cual se pagó un millón 775 mil pesos, desde un precio inicial de un millón 472 mil pesos, así como una camioneta blindada marca Chevrolet Tahoe, modelo 2015, con un millón 170 mil pesos, desde 708 mil 300 pesos fijado como precio base.
Un interés especial generó la subasta de algunos los automóviles marca Volkwagen Sedán, conocidos como “vochitos”, entre ellos uno modelo 1990, que de un precio inicial de 10 mil pesos logró recaudar más de seis veces más, para un total de 65 mil.
También un vochito clásico modelo 1951, de la primera edición que circuló en el país, levantó 360 mil pesos, más de 100 mil pesos por arriba de los 253 mil estimados como precio base de compra, pero 17 lotes fueron declarados desiertos, principalmente camionetas blindadas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dará a conocer este lunes la cifra definitiva de los recursos obtenidos en esta subasta de automóviles, durante su tradicional conferencia mañanera, de acuerdo con el SAE, organismo que se transformará en el “Instituto para devolver al pueblo lo robado”.
Forbes
