En los nueve meses transcurridos del actual año, ya son nueve los periodistas asesinados en el país. El sábado 22 de septiembre el reportero de "El Heraldo de Chiapas" Mario Gómez Sánchez, fue hallado muerto cerca de su domicilio, en Yajalón, Chiapas.
Este hecho fue condenado por la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), la cual agregó que con este crimen, ya son al menos nueve los periodistas asesinados en lo que va de 2018, además que el comunicador Agustín Silva continúa desaparecido desde enero. La instancia internacional recordó que en 2017 fueron asesinados 12 periodistas.
Gómez daba cobertura a temas electorales, de política, desapariciones, medio ambiente e inseguridad.
De acuerdo con la información recibida por la ONU-DH, el periodista habría sido víctima de amenazas en diferentes momentos. Sin embrago, pese a que presentó la denuncia correspondiente, "no se habrían presentado resultados de las investigaciones".
Jan Jarab, representante en México de la ONU-DH, expresó: “La violencia contra periodistas no cesa. La principal medida de prevención de estos ataques es una procuración de justicia eficaz y exhaustiva, que considere la línea de investigación relacionada con la labor periodística con un análisis de contexto que no descarte la autoría intelectual.”
Agregó que "la investigación del presente homicidio debe ser ejemplar y producir resultados. No puede quedar impune este atroz crimen”.
La ONU-DH llamó a las autoridades a adoptar medidas efectivas e inmediatas de prevención y protección para quienes ejercen el periodismo.
Fuente: jornada.com