Luego de que un grupo de reporteros que cubren sus actividades rompió por accidente el espejo retrovisor de su auto, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador les dijo que "no hay problema".
Al salir de sus oficinas en la colonia Roma, López Obrador abordó su auto Jetta blanco y ya a bordo fue abordado por los reporteros quienes con el auto en movimiento realizaban preguntas al presidente electo, lo que ocasionó que el espejo retrovisor del copiloto se rompiera.
Aunque López Obrador intentó sujetarlo con sus manos y pidió a los reporteros tener cuidado, el mandatario les aseguró que "no hay problema", con el incidente.
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