La Confederación Sindical Internacional (CIS) expulsó de sus filas a la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) por realizar acciones contrarias a defender los derechos de los trabajadores.
Con la expulsión, la CTM y la CROC tendrán una participación acotada ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La CSI realizó un debate sobre el nuevo rumbo del sindicalismo y su rol actual ante la actual coyuntura política internacional, como resultado de ello determinó reconstruir un nuevo internacionalismo de transformación social a partir de un nuevo pacto social “capaz de recuperar” la centralidad del trabajo.
De acuerdo con la CSI el nuevo sindicalismo pugna por discutir el rumbo del modelo actual neoliberal, impulsando una nueva gobernabilidad democrática mundial, basado en los “plenos” derechos de los trabajadores, el derecho de los pueblos al desarrollo, a la justicia social y a la democracia.
En ese sentido 10 sindicatos afiliados de la región, entre ellas la CTM y la CROC, anunciaron su decisión de abandonar la Confederación Sindical de Trabajadores y Trabajadoras de las Américas (CSA), organización regional de la CSI.
“Desde entonces dichas organizaciones han efectuado distintas declaraciones y acciones contrarias a los principios e intereses de la CSA y CSI y por lo tanto de los trabajadores”, expuso la CSI.
Forbes