La comisión va a tener la prioridad para despachar energía eléctrica, por encima de plantas solares, eólicas y de ciclo combinado
El presidente López Obrador envió a la Cámara de Diputados una propuesta para reformar la Ley de la Industria Eléctrica y con ello blindar a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y limitar a las empresas privadas en el país.
El documento propone darle prioridad a las plantas de la Comisión para despachar energía dentro del sistema eléctrico, dejando al final a las plantas solares, eólicas y las de ciclo combinado en empresas privadas.
El esquema actual establece que las primeras en despachar energía son aquellas plantas que tienen menos costos de generación, pero la iniciativa presidencial argumenta que la legislación fue diseñada para favorecer a los generadores privados “con grave perjuicio a la CFE”.
Plantea un sistema tarifario de precios que van a ser actualizados conforme a la inflación.
“Quieren regular las tarifas porque con el actual esquema no han logrado que bajen”, afirmó Paul Alejandro Sánchez, analista del sector energético.
Aún con la medida aprobada, los subsidios gubernamentales para los hogares van a continuar para evitar alzas en los precios, detalló.
También se obliga a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) a revocar permisos de autoabastecimiento cuando hayan sido obtenidos ilegalmente; así como revisar la rentabilidad y legalidad de los contratos eléctricos suscritos entre el gobierno federal y los productores independientes de energía.
Además, somete el otorgamiento de permisos a los criterios de planeación del sistema eléctrico que emita la Secretaría de Energía.
La iniciativa enviada con carácter de preferente, el pasado viernes 29 de enero, en la noche, plantea cambiar los artículos 3, 4, 12, 26, 35, 53, 101, 108, 126, de la Ley de la Industria Eléctrica, bajo el argumento de que la CFE quedó “fracturada por la reforma energética”.
“Es un golpe para las empresas privadas, protege y fomenta el monopolio de la CFE en el mercado”, afirmó Paolo Salerno, experto de Salerno y Asociados.
Opinó que se trata de una “contrarreforma” a medias que va a generar incertidumbre para los inversionistas al cambiar las reglas.
EL HERALDO
